Sinfonias celestiales rodean mi mente, tu nombre surge entre ellas penetrando en lo más profundo de mi ser. Siento como mi piel vibra no hay explicación a lo que estoy sintiendo... no es un sueño y si lo fuese no quiero despertar.
Guiado entre aguas cantarinas que calman mi sed, diviso tu rostro y tus manos me dan la bienvenida. Caigo de conmoción y a la vez fuerzas salen de mí , danzas entre delfines, me doy cuenta que es mi corazón latiendo por ti. Lágrimas de alegria caen a la tierra y brotan de ella capullos de rosas llenas de esperanza y entrega.
Que maravilloso despertar, el sol brilla traspasando los rincones más oscuros, el viento acaricia mi mejilla ruborizada por exitaciones y asombros.
Caminemos junto a la olas del placer, bebamos del néctar del amor, forjemos un mundo mejor, sólos tu y yo.